Los precios de los combustibles (nafta y gasoil) tendrán un aumento cercano al 10% la semana que viene. Es porque vuelven a subir los impuestos a los combustibles y las petroleras trasladarán al menos la devaluación acumulada del último mes, el 2% mensual que sube el dólar.
En Junín, tomando como referencia a YPF, la común pasaría de $988 a $ 1.087 aproximadamenbte mientras que la premium Infinia saltaría de $1180 a $ 1.230 aproximadamente
Mientras tanto, según aseguran los principales ejecutivos de las refinadoras, el atraso de los precios en los surtidores contra la paridad de importación (import parity) es de 10% en el gasoil -21% en canales mayoristas, donde compra por ejemplo el agro para la cosecha gruesa- y de 29% en la nafta.
"Estamos comprando el petróleo crudo Medanito -de Vaca Muerta- a 66 dólares por barril, y la paridad estaría en torno a US$ 81", dijo una fuente de la industria. Esa brecha también quieren cerrar las petroleras para recuperar márgenes, que volvieron a caer a partir de febrero mientras se desploman las ventas de combustibles.
Según la consultora Politikón Chaco, la demanda de nafta y gasoil retrocedió un 12,1% interanual en marzo a nivel nacional.