En la esquina de las Avenidas Saavedra, Miguel Gil y Urquiza, de la localidad vecina de Chacabuco, trabaja una joven madre llamada Gisella que vive sola junto a sus 2 pequeños hijos.
Allí esta joven ofrece el servicio de limpieza de vidrios a los ocasionales conductores que frenan por los semáforos.
Según comentó al portal quepensaschacabuco, ella vive muy humildemente y no tiene recursos para darle la calidad de vida necesaria a sus niños, básicamente necesitaría ropa, calzado y alimentos, no cuenta con celular, de la única manera que se la puede ayudar es llegándose hasta ahí para dialogar con ella y preguntarle sobre sus necesidades más urgentes.