Este 8 de marzo, con el grito "ni una trabajadora menos", las del Mujerío estaremos reclamando. Estaremos las que a partir del 2015 salimos a gritar Ni Una Menos, dejen de matarnos.
Estaremos las que levantamos las banderas de Evita, que son Justicia Social, voto femenino, derechos políticos.
Estaremos las del Luche y Vuelve, desaparecidas, encarceladas y masacradas por la dictadura.
Estaremos con las banderas de las heroicas Madres y Abuelas, que cuando nadie podía, solas enfrentaron a los milicos.
Estaremos las docentes, Trabajadoras de la salud, la industria plástica, municipales, mecánicas, judiciales, empleadas de comercio, independientes, profesionales, trabajadoras de casas particulares, de geriátricos, de Programas Sociales como el ex Argentina Trabaja.
Estaremos las jubiladas que accedieron con dignidad y derecho a la Seguridad Social, hoy precarizadas y sin acceso a la salud.
Estaremos las pensionadas olvidadas y expulsadas del amparo estatal. Estaremos las estudiantes reclamando que no cierren escuelas y cursos y por el no al aumento del transporte.
Estaremos las que gritamos Educación Sexual para prevenir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir.
Estaremos por el cupo trans aprobado en la Provincia en 2015 y sin cumplimiento. Estaremos gritando que las niñas deben ser "niñas no madres" y el Estado debe garantizarlo previniendo, protegiendo, sancionado, reparando.
Estaremos las que gritamos libertad a Milagro Sala, detenida desde 2016. No a la persecución política- judicial a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Estaremos porque somos la marea imparable que sueña y piensa que la Patria justa sin violencias, libre soberana feminista y latinoamericana es posible. ¡Bienvenidas a esta lucha!