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“No sé qué voy hacer cuando vea a las asesinas en el juicio”, dijo la mamá de Naira

A un año de la muerte de su hija, Nancy disparó contra la escuela, la justicia y el servicio de emergencias. “Tendría que existir la pena de muerte”, afirmó en una entrevista exclusiva con Junín Noticias. El domingo habrá una marcha en memoria de la adolescente.

Por Redacción

Sabado, 25 de abril de 2015 a las 06:31

Dolorida e indignada. Así define su estado de ánimo la mamá de Naira Ayelén Cofreces, la adolecente que el 23 de abril del año pasado fue atacada a golpes por sus compañeras en la puerta de la escuela Nº 5, a la que asistía en el turno noche.

Aquel día Naira recibió puñetazos y patadas en la cabeza, fue arrastrada por el piso y golpeada salvajemente contra la pared por al menos tres chicas, mientras algunos jóvenes trataban de separarlas y otros, impunemente, grababan la escena sin intervenir.

Luego de una revisación superficial y ante su negativa a ser trasladada al hospital, Naira llegó a su casa, cenó, miró la novela y cerca de las dos de la madrugada se fue a dormir, como todas las noches.

Pero algo no estaba bien. A las pocas horas se despertó aturdida y con un fuerte dolor de cabeza, por lo que su familia decidió llevarla al hospital. Allí los médicos descubrieron que tenía un gran hematoma en el hemisferio izquierdo del cerebro y resolvieron operarla de urgencia.

La adolescente luchó con todas sus fuerzas, pero luego de agonizar durante cuatro días en terapia intensiva, falleció, dejando un gran dolor entre sus seres queridos e innumerables cuestionamientos en el conjunto de la sociedad.

¿Cómo puede un grupo de jóvenes resolver sus diferencias a los golpes? ¿Por qué tanta agresión? ¿Quiénes son los responsables de frenar esta violencia?

A un año de la muerte de su hija y con tres imputadas por el crimen, Nancy dialogó en exclusiva con Junín Noticias y disparó contra la escuela, el servicio de emergencias y la Justicia. Consideró que para casos como el de Naira “debería existir la pena de muerte”.

-¿Cómo vivió este año?

-Es el día a día…levantarme y no saber cómo voy a estar, acostarme…. Para Pascuas me la pasé todo el sábado y el domingo acostada, llorando, depresiva. Por ahí me levanto un poco por la gordita (hermana menor de Naira). Ella me ayuda mucho, porque si no estuviera ya estaría internada en psiquiatría.

-¿Cómo está compuesta su familia?

-Ahora estoy yo, mi pareja y la nena. Yo me levanto por ella, que todo el tiempo me dice: “mami, no llores”.

-¿En qué estado está la causa?

-Yo estoy un poco indignada, porque el fiscal Alvite Galante  siempre me dijo que cuando yo tuviera dudas lo vaya a ver y que no me deje llevar por lo que dicen. Entonces yo fui con un rumor, porque me habían dicho que la menor estaba suelta.

Cuando lo fui a ver me dijo que me quede tranquila, que están bien presas, que están en Arenales, pero la menor ya tiene arresto domiciliario. Cuando me enteré eso me dio un ataque.

Según el fiscal ella habló y dijo que fueron las otras, pero yo tengo entendido que ella es la que le pegó a Sofía (amiga de Naira) y le sacó los dientes. Fue la primera que le pegó a Naira y le dejó el ojo negro; la que le dio la trompada fue ella, después siguieron las otras. Y sin embargo Alvite Galante dice que no tuvo nada que ver, que ayudó mucho para la causa… Hoy está con arresto domiciliario, ya salió, y yo me enteré porque fui a hablar con él, si no nadie iba a levantar un tubo para avisarme.

-¿Cuánto tiempo estuvo detenida la menor?

-Ella estuvo presa, pero prácticamente paseando. Porque yo vi por Facebook que festejó los 17, fue al zoológico, fue a un recital. Cuando iba la mamá a visitarla, ella salía porque era un instituto y tenía permiso. Acá me dijeron que no sabían, se enteraron cuando yo fui a quejarme.

-¿Ya tienen la fecha del juicio?

-No, todavía no. El otro día estuve con mi abogado, el Dr. Torrens, y me dijo que me iba a llamar cuando tenga novedades.

-¿Sabe de cuánto puede ser la pena máxima? ¿Qué esperan ustedes?

-Mi abogado se quiere tirar a perpetua, lo que pasa es que ahora cambiaron la carátula, pasó de homicidio calificado  agravado por premeditación a homicidio simple. Y la pena puede ser de 11 a 21 años.

-¿Qué reflexión hace a un año de la muerte de su hija?

-Yo estoy indignada con todo; con la escuela, con la ambulancia que no la llevó…

Desde el año ‘93 trabajo en escuelas porque soy auxiliar, y sé que en todas las escuelas está el botón antipánico, que lo podría haber apretado cualquiera. La Policía está a dos cuadras, porque hacen el descanso ahí a la vuelta, así que hubiera llegado rápido.

El vicedirector socorrió Sofía y se fue adentro a llevarla porque vio que le salía un poco de sangre por los dientes, pero la dejó a Naira en el piso.

Ese día la directora se había retirado antes, pero dijo que en el recreo había escuchado una discusión, que le decían a Naira “te hacés la linda por la ropa”. Y se fue igual. Yo digo, ¿no se dio cuenta aunque sea de poner un patrullero a la salida?

Lo que más me indigna es que en un año nadie de la escuela levantó el tubo para preguntarme si precisaba algo o cómo estaba.

-¿Por qué fue la pelea?

-Mi hija era re sencilla. Fue todo por la compañera que, como ya sabía que iba a ver una pelea, se fue antes. A esa chica hacía poquito que la habían incorporado al grupo, porque todos la despreciaban porque decían que era antipática, agrandada. Ella llamó al novio y se retiró antes por miedo. Entonces yo digo, si ella causa la pelea en el recreo, ¿por qué no avisó?

-¿Han vuelto a tener contacto con ella?

-No, yo nunca la vi. El día que yo la estaba operando a Naira, que estaba grave, la asesina entró a la escuela con un mechón de pelo de esta chica, porque como no la encontraron en la escuela, fueron a la casa y le dijeron “culpa tuya le dimos una paliza a tu amiga” y le pegaron en la puerta de la casa. Siempre tuvo mucho miedo.

-¿Cómo era Naira?

-Ella era re servicial, pero si tenía que ir a defender, iba. Y con la hermanita era como su segunda mamá, si tenía que llevarla al jardín a “cococho” la llevaba, con tal de que no faltara. Era muy madura.

-El domingo van a hacer una marcha...

-Sí, la marcha es a las 19.30, en memoria de ella y para reclamar justicia, porque la verdad es que acá justicia no hay. Yo le decía al abogado que tendría que existir la pena de muerte, porque encima después tenés que alimentarlos.

-Si existiera la pena de muerte ¿cree que estas chicas la merecerían?

-Si, más vale.

-¿Qué cree que va a pasar cuando las vea en el juicio?

No sé qué voy a hacer cuando las tenga enfrente. Yo le dije al abogado que no quería estar presente, pero tengo ir.

-¿Hace tratamiento psicológico?

-Voy al psiquiatra, él me mando hace rato al psicólogo, tendría que empezar.

-¿Y el resto de su familia?

-A la nena dejé de llevarla porque me quedaba lejos, pero la tengo que volver a llevar porque tuvo un retroceso. Empezó primer grado y no quería ir a ninguna escuela, decía que tenía miedo de que le peguen en la cabeza. Empezó a usar chupete y mamadera otra vez. La tuve que mandar a una escuela de campo.

-¿Recibieron algún tipo de ayuda del Municipio?

-Sí, ellos hicieron todo lo del velatorio porque yo estaba shockeada. Andrés (Rosa) estuvo siempre y hoy estoy viviendo acá gracias a la ayuda de ellos.