La renuncia de Martín Guzmán al ministerio de economía no solo desató la interna que estaba latente dentro del Frente de Todos sino que además generó una corrida bancaría en la que el lunes el dólar blue llegó a operar a $280. Esto provocó incertidumbre tanto en los comerciantes como en los compradores que se encontraron con un contexto de especulación y aumento en los precios.
"Los almaceneros y autoservicistas trabajamos el fin de semana sin cambiar precios y sin ocultar mercadería", aseguró y añadió que "al ver lo que estaba aconteciendo le enviamos notas a los mayoristas para que nos den la oportunidad de poder reponer la mercadería que habíamos vendido a precio del sábado".
A pesar de su accionar denunció que se encontraron con que los comestibles habían aumentado un 10% mientras que lo que respecta al grupo de elementos de limpieza e higiene personal habían incrementado su valor en un 13%. Además agregó a esa escalada se le sumó la falta de celulosa en el país lo que hizo que "empezara a faltar papel higiénico y rollo de cocina con una suba de un 25%".
En ese sentido consideró que "está todo con un rumbo sin norte el tema de los precios" y relató su experiencia con una empresa de café, a la que calificó como importante, y que el mes pasado ya había implementado un "incremento del 19% que nos llevó a el frasco a $690", expresó. Ahora, esta semana lo ofrecen para "vender a $1.100" y señaló que los vendedores tienen la orden de no tomar pedidos por el momento.
"Esto es una confusión porque si la mercadería varia 10% yo creo que era más o menos genérico para todos, ahora si el café que ya había sufrido un cambio tremendo hay que ponerle un valor nuevo esto aún complica más", manifestó.
Más controles a los mayoristas
Desde la Federación enviaron una nota a la ministra de Economía Silvina Batakis para que "tome cartas en el asunto", dijo ya que "el dólar (blue) hizo picos de $280, ahora creo que esta en $260 si obviamente tomaron el pico para poner los precios, ahora que bajó tienen que bajarlo".
Además solicitó que se lleven a cabo relevamientos tanto en los mayoristas como en los comercios y deslizó "si quieren pueden empezar por nosotros, no me preocupa que me pidan la boleta para ver por qué pagué tan caro el café. Que vayan al mayorista y que le pregunten por qué me lo cobraron así".
En ese plano consideró que a la hora de hacer controles "parece que el universo de comercialización de alimentos es algo inanalizable o grande pero estamos hablando de tres actores, el fabricante el mayorista y nosotros". Por último esgrimió: "yo no le hecho culpa a nadie solo digo que hay responsabilidades y estoy convencido de que hay un formador de precio".
La canasta de Precios Cuidados
Con respecto a la nueva canasta de bienes y servicios de Precios Cuidados que empezó a regir ahora dijo que "no le tiene fe" porque "uno evalúa lo que fue hasta ahora y la verdad que no tuvo resultados".
Según explicó de los 60 productos solo se consiguieron 17 en el AMBA y por fuera de esa zona "no conseguimos nada". A su parecer los responsables de esto fueron los empresarios ya que no tuvieron voluntad para cumplir el acuerdo, "nosotros tuvimos la voluntad de ir ese 8 de abril a buscar la mercadería para exhibirla en la góndola para ponerle el cartelito y no la encontramos", concluyó.