¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

Fútbol y literatura: "La familia y Neymar"

Debutó Brasil y la magia de Neymar despertó la imaginación del papá Scher, que nos cuenta del hermoso cuadro que podría haber formado con su familia!

Por Redacción

Lunes, 15 de junio de 2015 a las 13:11

Por Ariel Scher para Familia Mundial

En Buenos Aires

(Novedades en la familia, hijito. Novedades de Copa América)

Tenemos al primo Darío, que hace seiscientos cincuenta y dos domingos se asoma con sol o con sombra, con novia o sin novia, levanta la pierna izquierda y trata sin suerte de sacar una volea idéntica a la que Zinedine Zidane le clavó al Bayer Leverkusen en el 2002 para que el Real Madrid fuera campeón de Europa. Tenemos al primo Daniel, que desde los veintitrés años se planta con una naranja en la calle, gambetea a la gente que habla en inglés y exige que le digamos que cada vez está más cerca de reproducir el gol de Maradona. Tenemos al sobrino Uriel, que elige una avenida distinta madrugada tras madrugada, acelera con la elegancia de un ciervo y grita "Milito, Milito" mientras los taxistas le tocan bocina y los linyeras lo aplauden sin parar. Tenemos a la tía Raquel, que en todos los junios se calza rodilleras, se abriga con su buzo más antiguo y vuela entre los dos árboles más altos de una plaza gritando que es el Pato Fillol contra el delantero que sea. Tenemos al primo Matías, que en todos los setiembres llama por teléfono a la tía Raquel, le pide prestadas las rodilleras y vuela entre los dos árboles más altos de una plaza gritando que es el Loco Gatti atajando frente al Cruzeiro el penal que le valió a Boca la Copa Libertadores de 1977. Tenemos a la sobrina Úrsula, que se rapa su espléndida cabellera siempre que suma más de diez pelos, usa unas botas bien de las pibas de ahora y con las suelas acaricia todas las piedras del mundo para que a las piedras del mundo les pase lo mismo que a las pelotas de fútbol cuando, sin botas y con botines, las acaricia Iniesta. Tenemos al amigo Pichi, que no tiene en su árbol genealógico ni un solo antecesor de apellido Méndez pero cuando hay Copa América les impone a los compañeros de trabajo que lo llamen Tucho Méndez porque Tucho Méndez fue el gran goleador argentino de la Copa América y, déjense de joder, por algún lado hay que empezar a ganar de nuevo este torneo. Tenemos a los sobrinos nietos, que aturden a las personas y a la atmósfera proclamando al unísono que ellos son Messi y hay que decirles y hay que creerles que sí, que por supuesto, que desde hoy y hasta la eternidad, son Messi.

Tenemos todo eso y somos felices porque parte de la felicidad consiste en ser testigos de cómo hay gente querida y querible que va detrás de un sueño loco o de un sueño cuerdo. Por eso somos todavía más felices desde que, hace un rato, el tío Tubi lanzó por la ventana los papeles de su tesis casi terminada, se zambulló adentro de unos pantalones cortitos y, a pesar del frío de otoño, se apoderó de la calle con una pelota. Dice que es Neymar y prueba tirarle sombreritos, como el del brasileño sobre un peruano, a todos los vecinos. Maravillosa familia, maravillosa vida: ahí lo estamos viendo. En cualquier momento le sale.

Ariel Scher para Familia Mundial